What Remains of Edith Finch: Historias atrapadas en el tiempo

Si existe un videojuego que redefine lo que entendemos por narrativa interactiva, ese es What Remains of Edith Finch. Este título, desarrollado por Giant Sparrow, no solo es un relato envolvente, sino una obra de arte que utiliza el medio del videojuego para explorar temas universales como la muerte, la memoria y el legado familiar.

Lo primero que atrapa es la casa Finch, un mausoleo viviente que parece suspendido en el tiempo. Cada rincón, cada habitación, es un eco de las vidas que la habitaron y una ventana hacia su trágico final. Sin necesidad de palabras grandilocuentes, la arquitectura de la casa cuenta historias, invitándonos a explorar un espacio que es tanto un refugio como un cementerio.

El mayor logro del juego radica en cómo utiliza distintos formatos para narrar las historias de los Finch. Cada miembro de la familia tiene su propio capítulo, contado a través de mecánicas únicas que se adaptan a su personalidad y destino. Desde un cómic de horror al más puro estilo de Tales from the Crypt hasta una secuencia en primera persona que mezcla la rutina laboral con la construcción de un mundo de fantasía, cada historia es un testimonio de la creatividad de sus desarrolladores.

Más allá de sus técnicas narrativas, el juego nunca pierde de vista su corazón: la conexión emocional que establece con el jugador. No solo estamos descubriendo cómo murieron los Finch, sino cómo vivieron, cómo amaron y cómo enfrentaron su propia mortalidad.

What Remains of Edith Finch no es solo un juego, es una experiencia. Una que nos recuerda que nuestras historias no mueren con nosotros, sino que quedan atrapadas en los espacios que habitamos y en los corazones de quienes las escuchan. Una joya imprescindible para cualquier amante de las narrativas que buscan empujar los límites de lo que los videojuegos pueden ser.